“Estuve poniéndome al tanto del proyecto de la instalación de cámaras de seguridad en la ciudad. Yo vengo de conducir la departamental concordia donde este sistema ya existe y ha dado excelentes resultados en prevención del delito en las zonas donde están instaladas”.
El funcionario agregó “No es una solución, sino un anexo más que hace a la seguridad ante la falta de hombres para que estén en todos los lugares de una ciudad. Este es un complemento que están adoptando muchos municipios de la provincia y el país”.
Cámaras en Crespo
Albarrasin manifestó “Creo que aquí se debe llevar adelante este proyecto y ustedes verán los resultados a futuro. Por supuesto que hay factores legales que se deben manejar, ya hay muchos municipios que lo han adoptado y no han tenido oposición por parte de la justicia para la instalación de cámaras. Muchos hablan de invasión a la intimidad, pero debemos dejar en claro que la seguridad es un problema público, y al estar las cámaras instaladas en las calles hacen que se practique una observación pública”.
Finalmente indicó que “Los organismos judiciales no se oponen a estas tecnologías por lo cual no hay problemas para desarrollar estos sistemas. Sin duda que hay gente que se opone y opina de forma distinta, a ellos les informamos que las cámaras son solamente una ayuda a la función policial”.
FM Estación Plus Crespo
Un grupo en Facebook contra la instalación de cámaras de seguridad en Crespo
El grupo fue creado a mediados del año pasado y cuenta con 169 miembros. Según indica su descripción es un “Grupo de gente que está en contra de la ubicación de un sistema de video vigilancia en Crespo”
Consignan que “Queremos una ciudad de calles vivas y personas libres, no una cárcel a puertas abiertas”.
Cuando se conoció la inquietud para la instalación de cámaras de vigilancia en nuestra ciudad, inmediatamente se escucharon voces de apoyo, pero también a muchas personas que se oponen a la iniciativa.
“No a las cámaras de vigilancia en Crespo” es el nombre del muro en Facebook y según explica uno de sus creadores “No intentaremos hacer un análisis criminológico del tema. No trataremos cuestiones como la delincuencia de cuello blanco y su importancia. Ni atacaremos la inutilidad de las cámaras de vigilancia para delitos de gran importancia como la evasión impositiva, lavado de dinero, etc. Algunos podrán decir que estos temas no afectan a la ciudad, otros que sí, pero la realidad es que sería necesario hacer un análisis que todavía, y por diversos motivos, no estamos a la altura de realizar. Tampoco analizaremos la selectividad penal y como funciona esta, aunque si resulta interesante recordar que ésta implica en pocas palabras que el sistema “persigue y encarcela a los delincuentes de pequeños delitos por que estos son más tontos”. Es decir, no podemos comparar la complejidad o el tiempo de trabajo que demanda (para los tribunales) la investigación de delitos como un lavado de dinero con la complejidad de un hurto. También es dable entender que estos delitos de evasión de impuestos implican un nivel económico determinado. Es decir cada clase social tiene un delito de acuerdo al nivel que poseen, pero el “garrote lo tiene una sola clase”. Sin embargo, si nos interesa analizar aquí cuestiones más humanas por denominarlas de alguna manera”.
Pregunta el autor del Muro: ¿Por qué cámaras de vigilancia en Crespo? Somos al parecer capaces de entregar nuestra intimidad (de un acto, de una palabra, de un gesto) al control de personas que no conocemos. Es un hecho muy importante entender que estas grabaciones, que pueden en su interior no contener ningún registro de delitos, pueden sí grabar otras cosas, pueden tener registro de nuestras actividades, de todo lo que no debe ser conocido por otros que no sean los participantes. Ese registro que hoy no posee ningún delito, mañana puede ser un expediente de estudio de conductas de sujetos “peligrosos” por su pasado y por las condiciones de su pasado. También los militares utilizaban registros de actividades para encontrar y hacer desaparecer personas. No estamos aquí diciendo que vuelva a suceder eso, si estamos diciendo que estamos creando o aceptando “un monstruo” del cual no podemos ni de lejos “medir las consecuencias”, y el pasado es un buen aprendizaje de que los monstruos suelen tener más vida que sus creadores. Se nos dirá que la seguridad lo requiere, que es hora de tomar medidas drásticas. Creemos que estamos en un tiempo de inflexión para un sistema que está empezando a mostrar sus fauces como nunca antes. Pero suponer que la solución es volvernos humanamente mas predecibles, más sórdidos, más controlados es “una vergüenza”. Pensar que los lugares públicos se convertirán en lugares policiales nos da, sencillamente, pena. ¿Entonces cual es la propuesta? Es muy sencilla, estudiar, investigar experiencias de política criminal más humanas, combatir la pequeña delincuencia con acceso a la educación, con trabajo, con solidaridad para los lugares vecinos, con respeto de nuestra condición. Existen infinidad de propuestas de política criminal que nada tienen que ver con el rebajamiento de nuestra persona, que tienen aspectos positivos de creación de un lugar más seguro, más libre, más oxigenado (no más cercado y más vigilado)[1]. Es probable que este escrito no reciba mayores atenciones, aun así, dejamos planteada una cuestión que no es menor. Solo eso, una serie de preguntas y quizá también, un grito desesperado, como diría Pasolini. Crespo es una ciudad ejemplificadora en muchos aspectos, especialmente en aquello concerniente a la interacción humana para llevar adelante objetivos sociales, una ciudad donde los índices delictivos son bajísimos, con una economía que no tiene mayores problemas, seguramente con muchas cosas por aprender, pero: ¿se merece Crespo Cámaras de vigilancia?. Si la respuesta es positiva, es hora de prepararnos, pues mañana quizás sea hora de pensar en nuevos escondites, nuevas complicidades, nuevos temores. Y ellos, deberán pensar en nuevas armas para “desalmarnos”.
[1] Ver al respecto las propuestas de la importante criminóloga Venezolana Lola Aniyar de Castro. Y sus experiencias en distintos lugares de Latinoamérica.
FM Estación Plus Crespo
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